Si
bien tus finanzas personales dependen de tus ingresos, son tus gastos los que
te están empobreciendo sin darte cuenta. ¿Por
qué? Esto se debe
a que cuando hablamos de las finanzas personales, solemos enfocarnos en cuánto
ganamos, y no en lo que nos gastamos.
No
pienses que tu situación actual se debe a lo poco que ganas, sino a lo mal que
inviertes lo que tienes.
Aquí tienes 12 gastos innecesarios que
una vez eliminados o modificados, cambiarán por siempre tus finanzas
personales; pero si los ignoras te seguirán empobreciendo, y lo peor es que ni
cuenta te das:
1. Cable de televisión
¿Cuantos
canales de televisión ves con frecuencia 3, 5… máximo 10? Para qué necesitas
entonces 120 canales, paquetes de películas, y cuánto beneficio te ofrecen
extra?
Recorta tu plan de cable de televisión.
Si eres un consumidor empedernido de películas y series considera Netflix, una alternativa muchísimo más económica.
Eres de los que paga por canales en High Defintion sin por lo menos tener un televisor con estas condiciones? O peor
aún, no sabes cómo está armado tu plan de cable?
Revisa tu factura y mira si estás
consumiendo al máximo este servicio, en caso de que no sea así, ajústalo o
elimínalo.
2. Comisiones bancarias
¿Sabías
que cada vez que retiras dinero en los cajeros del banco te están cobrando una
comisión? Sabías que cada retiro bancario que haces en cheque tiene un costo
adicional? O sabias que en algunas ocasiones, por pagar con tu tarjeta de crédito,
te ahorras algunos impuestos al consumo?
Tienes
varias alternativas: Existen bancos que cobran tasas más
baratas, que hacen concursos para personas que utilicen la tarjeta o que,
incluso, no te cobran comisiones. Investiga cuánto te cobran en tu sucursal y
analiza qué opciones tienes con otros bancos.
3. Garantías extendidas
Estas
garantías son aquellas que te ofrecen cuando compras productos, normalmente de
tecnología, y que te protegen adicionalmente. Si bien es importante cuidar
tus compras, existen algunas garantías extendidas que no sencillamente son
un desperdicio de dinero.
Aparte de ser costosas, sus términos y
condiciones (que nunca has leído!) tienen un sinnúmero de cláusulas que te
dejan desprotegido.
La mejor solución es ser cuidadoso con
tus pertenencias y quédate con la garantía que viene por defecto con el
producto.
4. Arriendo
No
estamos diciendo que dejes de pagar arriendo o que vivas en la calle. La única
pregunta es si ese apartamento lujoso en el sector más exclusivo y costoso de tu
ciudad vale la pena.
Si cambias de apartamento por uno más
pequeño y en otra ubicación, no sólo dejarás de gastar dinero en un arriendo
costoso, sino que dejarás de pensar en cómo llenar esos espacios vacíos que
requieren dinero.
Por último, si estás pagando cuotas muy
elevadas por concepto de arriendo considera la posibilidad de adquirir un
crédito hipotecario y comprar tu propia casa. Es preferible pagar cuotas que
tendrán un retorno, y no un arriendo.
5. Telefonía y datos de internet
¿Cuántos
minutos, mensajes y datos de internet tienes cada mes en tu plan de telefonía
celular? Los consumes todos? Sabes al menos cuántos tienes?
Seguramente
no.
¿Por qué no buscar uno que sea más
acorde con tus hábitos de consumo, buscar otra compañía que te preste el mismo
servicio por un precio menor o recortar servicios que no utilizas?
Ahora, si eres de los que no tiene
un plan sino que recargas tu línea cada vez que se acaban los recursos, te
invito a que hagas cuentas y veas que es muchísimo más rentable un pago mensual
y no algo esporádico.
6. Compras por internet
Las
tiendas en línea son unas de las mayores enemigas de tus finanzas personales.
La mayoría de compras que haces por allí son innecesarias y te están
empobreciendo de manera acelerada.
No solamente son los zapatos, ropa y
accesorios, también son los servicios premium que adquieres y nunca
utilizas. Además, estas compras vienen con gastos de envío, que casi nunca
tenemos en cuenta y que incrementan el valor de la factura
Solución: La
próxima vez que vayas a comprar algo por internet, pregúntate sí lo necesitas,
una vez respondas, espera un día para hacer la compra. De esta forma evitas
compras compulsivas que no necesitas.
7. Comida rápida
La comida rápida,
los restaurantes y almuerzos de oficina se disfrutan más, entre menos veces se
repitan. Si cada 8 días estás comiendo en la calle hamburguesas, pizzas y
comida china no sólo estás acabando con tus finanzas, estás a acabando con tu salud física.
No
hay nada de malo comer en la calle de vez en cuando, salir a comer con tus
amigos o en una cena especial con tu pareja, pero si esto se convierte en parte
de tu rutina no sólo se convertirá en algo sin gracia sino que se afectarán tus
finanzas.
Lo mismo ocurre para los domicilios, si
es que estás pensando en pedir comida a tu casa.
8. Seguros de vida
Los
seguros de vida no tienen nada de malo, es más, sirven para proteger el futuro
de tus familiares. El problema está con el tipo de seguro de vida que
estás pagando.
Independientemente del que vayas a
escoger recuerda que su valor va a depender de tu edad, de los riesgos que
asumes y otros factores como tu salud y familia. La sugerencia es que busques
alternativas, por ejemplo como tu tarjeta de crédito, que ofrece seguros por
ser untarjetahabiente,
o fondos de pensiones que te aseguran por tener una cuenta con ellos.
Si nunca has hecho un análisis
seguramente estés pagando un plan costoso, o un plan que te protege de riesgos
que no corres o que ofrece unos servicios que no utilizas.
Haz
la tarea de investigar primero para tomar una decisión acertada.
El
amor, la amistad y afecto no se demuestran por el precio de tus regalos, así de
simple. Un regalo de miles de dólares no demostrará cuánto amas
a una persona.
Si
lo que quieres es impresionar a los demás con tu “amplitud”, estás invitado a
seguir empobreciéndote a punta de regalos costosos.
Además, el amor de tu vida no te va a
querer dependiendo de la cantidad de ceros que vale tu regalo; y si lo hace
así, es momento de reconsiderar si eres el amor de su vida.
Alternativa: No
caigas en la trampa de convertir tus relaciones en un simple intercambio de
regalos costosos. Considera mejor regalar experiencias, estás valen menos,
y como diceAlejandro Gaviria, se aprecian con el tiempo, mientras que las cosas van perdiendo su
valor.
10. Tiquetes de
lotería
¿Eres
de lo que piensa que la única forma de hacerse rico es comprando la lotería, y
que si no la compras, nunca lo podrás hacer? Que tan triste puede ser el
hecho que tu riqueza dependa de un sorteo, y no de tus actos y decisiones.
En definitiva comprar la lotería no sólo
te está quitando tu dinero, sorteo a sorteo, sino que refleja tu mentalidad de pobreza.
11. Cafés, lattes y capuccinos
¿Cuánto
dinero has gastado en cafés de 3 dólares? En mi caso particular, muchos (este
es un punto que debo revisar de manera particular).
Tomarte un buen café en un espacio
agradable vale la pena, pero su disfrute esta inversamente correlacionado con
su hábito de consumo. Es decir, entre más veces lo haces, menos lo vas
disfrutando.
Haz las siguientes cuentas:
o
Con dos cafés
que dejes de comprar en la calle, tendrás el dinero suficiente para comprar una
bolsa de café y prepararla en casa.
o
El café que
consumes durante un mes en la calle, es equivale a una cafetera económica para
prepararlo en tu casa.
o
Y finalmente,
el dinero que gastas en café en la calle durante dos meses, es equivalente a
una cafetera especializada que prepara el mismo latte y capuccino que estás
comprando.
Recuerda que no hay nada de malo con
disfrutar de estos placeres de la vida, a mí me encanta el latte, pero cuando lo
haces todos lo días, deja de ser un placer y te está empobrece sin darte
cuenta.
12. Suscripciones
Por
último están las suscripciones a revistas, regalos sorpresa, mensualidades a
gimnasios, entre otras que jamás utilizas. Por ejemplo:
o
Estás
suscrito a 2 o 3 revistas que apenas hojeas y que tienes acceso a sus artículos
en redes sociales.
o
Pagas una
mensualidad en el gimnasio el cual visitas menos de 15 veces al mes.
o
Estás
suscrito a cosas que no utilizas, que se cobran automáticamente en tu tarjeta
de crédito, que tú pagas y ni cuenta te das.
Trabajas para pagar cosas que no
utilizas, o si lo haces, es parcialmente. Si quieres pagar un gimnasio
gánate ese derecho con constancia. Paga una semana y si vas todos los días,
paga un mes, si vas la mayoría de días paga el siguiente.
Con el tema de revistas, deja de botar
tu plata si no las vas a leer. Simplemente no renueves la suscripción y accede
a este contenido en sus sitios web o redes sociales.
En definitiva, abandona estos 12 gastos
innecesarios que te están empobreciendo sin darte cuenta, tus finanzas
personales mejorarán considerablemente.
Existen muchos otros gastos innecesarios
que te empobrecen sin darte cuenta, ¿tú cual agregarías a esta lista? ¿De qué
manera estás desperdiciando el dinero que tanto trabajo te costó conseguir?
Informacion Obtenida de: http://www.emprendiendohistorias.com/gastos-innecesarios-que-te-empobrecen/